En amplias zonas de América y en Canarias es una especie de cesta o jaula formada de varillas de madera, que se utiliza para el transporte de mercancías delicadas. También se aplica a la vasija hecha de fruto leñoso de un árbol tropical llamado huacal o jícaro. Es válida su grafía «guacal».

A propósito de esta palabra, es menester aclarar que en la República Dominicana se aplica a un tipo de edificio gubernamental. La analogía entre el edificio y la vasija, según se dice popularmente, se debe a la cantidad de personas que se nombran en el Estado, pero que no trabajan. Es decir, una botella es un cargo o espacio por el que una persona recibe un salario, pero no trabaja realmente, entonces, como las botellas se colocan en los guacales para su transportación, se terminó llamando guacales o guacalitos a dichos edificios.