Rita Díaz Blanco
Actualmente es miembro correspondiente de la Academia Dominicana de la Lengua, del grupo literario El Interiorismo y directora del Instituto Lingüístico Dominicano. Le apasiona la investigación lingüística, la literatura y la escritura. Es fundadora del Grupo Educativo Factum y encargada editorial del grupo Bienetre Media.
Cómo lo decimos los dominicanos
La lengua es una especie de bola mágica que recrea cómo piensa, vive y se relaciona el sujeto con los demás. Ella permite que desarrollemos de manera peculiar la forma de decir las cosas, de concebir la realidad y de transferirle a los hechos y sucesos esa particularidad que nos identifica como personas. Cuando escuchamos o leemos a alguien, nos formamos una idea de su forma de ser, de ver la vida; especulamos sobre la región geográfica y lingüística a la que pertenece y preconcebimos a sus paisanos por el uso que hace de su lengua. El dominicano tiene una especial forma de decir las cosas que lo distingue de otros países que comparten el español.
Cuando se quiere decir que se hace algo para acrecentar un mal ya iniciado se le echa leña al fuego/ más leña a la candela/ se siembra quiquilla o echa veneno: «Lo que ellos han manifestado fue el sentir de la Iglesia, pero no hay que echarle veneno, no hay que echarle leña al fuego (L.D., 21/04/2019).» Cuando alguien es calmado y no se altera por nada no tiene sangre en las venas/conserva la sangre fría/ tiene sangre de maco/tener sangre de chincha/tiene sangre fríaˈ o tiene la mecha larga. También hay otras expresiones que se refieren a esa actitud de no alterarse, como el decir a ese no lo mata nadie: «Pero Don Carlos, con sangre de maco, enfrentó los más variopintos enredos de reglas y de organización, logrando salir airoso de cada encomienda (L.D., 11/07/2018).» Si es el caso de alguien que habla mucho, se dice que habla hasta por los codos. Es común y popular utilizar esta locución para referirse a alguien que habla sin parar. A la par funciona la variación lexical hablar hasta por los poros y las locuciones hablar como un perico, haberse comido un loro y tragarse un radio: «En las esferas oficiales hay vivos que subestiman la inteligencia de los demás y hablar mentiras hasta por los codos (H.D. 10/12/2003).»
En ese mismo orden, cuando se estamos furiosos, nos ponemos que echamos chispas. Esta expresión se mantiene en las esferas cultas y de manera popular se toman más a menudo ˈestar quillaoˈ, ˈechar candelaˈ, ˈencendérsele/prendérsele la sangreˈ, ˈhervir la sangre (jerverle la sangre)ˈ, ˈprendérsele la pajarillaˈ, ˈsubírsele la sangre a la cabezaˈ, ˈtener la sangre calienteˈ, ˈtener la guinea más arriba del moñoˈ, ˈtener las espuelas puestasˈ, ˈtener las orejas calientesˈ y ˈno botar sangreˈ: «Le externo mis más sinceros respetos (…) pero así no, en buen dominicano estoy quillao (L.D.,26/01/2012).» Pero, si en realidad lo que queremos es despreciar o desatender a alguien le estamos dando la espalda, expresión común a nivel popular y nacional, utilizándose indistintamente entre clases sociales alta, media y baja. También se utilizan otras locuciones de empleo exclusivamente de la jerga juvenil como sacar lo pie, soltar en banda, dar banda, subir los vidrios, bajar la antena: «Guaidó llamó a la Fuerza Armada a dar la espalda al gobernante Nicolás Maduro, lo que los militares no secundaron, salvo un pequeño grupo (L.D., 01/05/2019).
Se trata de no sacarle los pies al pueblo. (L.D.,16/04/2009).»
La lengua española posee una extraordinaria riqueza dialectal en cuanto a fraseología se refiere. Las unidades fraseológicas recogen esa peculiar forma de decir las cosas, se emplean con el mismo significado idiomático, pero con un toque creativo y que aporta interesantes a dichas combinaciones y admiten diversas alternativas dentro de la misma cultura.
La lengua presenta variantes en las diversas zonas donde se emplea, es por esto que cada país latino tiene diferencias en sus coloquios y en las informalidades de sus dialectos.
La manera distinta de hablar español en la República Dominicana llama la atención, los dominicanos somos conocidos por hablar rápido y alto. El español que se habla en la República Dominicana es único en su forma, vocabulario y en las expresiones coloquiales utilizadas. Somos muy buenos en cambiarle el orden de las palabras y mezclarlas para hablar más rápido y más fluido. Los cibaeños (personas del Cibao) se distinguen por su carácter amigable, actitud pacífica, y gramática campesina. Son reconocidos por poner la “i” en lugar de la “r” o “l”. Por ejemplo, comei, bebei, vueita, pueita entre otras palabras. En la capital las personas son menos serviciales, pero más vibrante, cambian la “r” por una “l”, en lugar de decir chofer, dirían chofel, y manejal en lugar de manejar. En el sur es opuesto a la capital, cambian la “r” por la “l”. Por ejemplo, esparda, en lugar de espalda y carnavar en vez de carnaval.
Este artículo “Cómo lo decimos los dominicanos” muestra algunas expresiones del habla de los dominicanos. Algunas expresiones muy reconocidas que usamos los dominicanos mencionadas en el artículo son: “A ese no lo mata nadie”, se refiere a una persona muy calmada que toma las cosas de forma muy pacífica. Cuando decimos que una persona habla hasta por los codos, nos estamos refiriendo a una persona que habla mucho, mucho, mucho, pero mucho. Por ejemplo: Laura habla hasta por los codos, cuando empieza hablar, no hay quien la pare. Otra expresión muy renombrada es “Estoy quillao”, esto hace referencia a cuando una persona está en el extremo del enojo.
Cuando decimos que una persona es “Vende patria”, nos referimos a que nos ha traicionado. Por ejemplo, Laura es una vende patria porque se fue con otras chicas y me dejó sola. La expresión “Hacer bulto” es alardear de algo que quizás tienes o no, cuando una persona le dice a su grupo de amigos que viajará a Europa mañana, aun sabiendo que es mentira, está haciendo “bulto”. Los dominicanos utilizan mucho la palabra “Agallú” para referirse a una persona tacaña, que lo quiere todo y no le gusta dar lo que tiene.
El término “tiguere” lo utilizan los dominicanos para referirse a una persona de la calle que conoce la jerga y que es muy muy astuta. Los dominicanos también usan mucho la expresión “Estoy en olla” para hacer referencia a que están sin dinero. Cuando un dominicano dice: María te sacó lo pie”, se están refiriendo a que María ya no lo busca, ya sea porque se cansó de esa persona u otra situación.
“Te dejan con el moño hecho” es una de las otras famosas expresiones de los dominicanos que significa que te dejaron plantado. Cuando un dominicano utilice la expresión “Me tiene al coger el monte” se refiere a que alguien lo tiene muy cansado y por último, cuando un dominicano te diga “amanecí pito a pito” se refiere a que la noche anterior no pudo dormir (trasnochó).
Los dominicanos tenemos tantas expresiones diferentes y raras que nos vuelven únicos ante otros países. Las características que más nos identifican son la fluidez y la rapidez. Las personas en El Cibao hablan diferente a las que habitan en la capital y estos hablan diferente a los del sur. En toda la isla hay algunas características similares. Existe la aspiración de la s, por ejemplo, en vez de decir ¿Cómo estás? Se dice, ¿Cómo tu ta?, o en vez de decir “Las mujeres” se dice, “La mujereh”. Es algo que se usa mucho en países latinos al hablar de manera informal y que es muy utilizado en la República.
El español dominicano tiene influencias de varias culturas y puede variar según la región y la clase social. En la región sur suelen enfatizar las “R” en las palabras, mientras en el norte utilizan la “I” donde debería ir la “R” o entre palabras y en el centro, no es raro, que usen una “L” en lugar de la “R”. Unas particularidades generales del español dominicano son el seseo, el yeísmo y el no pronunciar las “S”.
Como nos dice el artículo, el español dominicano cuenta con un sin numero de expresiones que pueden tener significados muy confusos para las personas procedentes de otros países, por lo que es necesario que puedan acceder a sus significados. Otras expresiones de uso común por los dominicanos son:
No me haga cocote/no me monte culebra: no me engañes o no me des esperanza.
Baraja/tumba eso: olvida eso.
Te la comiste: te quedo muy bien.
La macaste: cometiste un error.
Dar muela/cotorra: enamorar a una persona, convencer a alguien.
Ta’ to’: está bien.
Hazme coro: préstame atención, apóyame.
Ta’ frío conmigo: se porta bien conmigo.
En olla/sin ni uno: no tener dinero.
No cojo corte: no acepto excusas.
Ta’ apero: que está bonito.
En resumen, el idioma español puede variar en los diferentes países en los que se habla, e incluso dentro de un país puede haber variaciones por regiones. En la República Dominicana existen diferentes formas de hablar el español dependiendo tanto de las regiones como de las clases sociales, pero también existen muchas expresiones que son usadas por las clases y las altas. El español dominicano es una variedad del español muy alegre y divertida.
El español dominicano son los distintos idiomas castellanos hablados en república dominicana, los que lo convierten en un idioma antiguo y moderno a la vez, es la forma del habla común de un grupo social establecido en la zona geográfica que poseen ciertas características propias, el español dominicano es también el primer dialecto desarrollado en el nuevo mundo, pues en la antigua colonia española de santo domingo (actual república dominicana) surgieron los primeros textos de la literatura española en américa.
En cuanto a ‘COMO DICEN LOS DOMINICANOS’, debemos saber que la lengua son los signos organizados y reglas combinatorias, que nos permite a nosotros los seres humanos las prácticas de ellos para que podamos comunicarnos, cabe destacar que todos estos países tienen su propio acento, dialecto o expresiones, Cuando aprendemos a comunicarnos con las otras personas, la lengua permite que desarrollemos de manera peculiar la forma de decir las cosas, en la república dominicana, cuando alguien está enojado para decir estoy enojado dice: ‘Toy quillao’, Un chin: se dice de algo para expresar “un poco”, para decir me llevas a casa: ‘Dame una bola’, ‘Tipo, tipa’: persona, expresión genérica; tipo raro, ‘ sospechoso’, Vaya pa’ llá , quítese de mi vista, aléjese, Embarrarse: meterse en un lío y “no de ropa”, Florearse o exhibirse, véase también “floretear”,’ Estar abatido’: significa que estás muy cansado, ‘Bajarle algo’: se dice cuando una persona está exagerando, ‘ Conchole’: es como decir ¡Joder!, ‘Embalarse’: es salir corriendo muy rápido, ‘Hambre de cuadritos’: es una expresión que los dominicanos utilizan para decir que tienen mucha hambre y entre otras expresiones más Achochado (achochao): es cuando no tienes ganas de hacer nada,’ Agallú’: es cuando alguien quiere conseguir algo a toda costa y al final no pudo, ‘Andariego’: que te guste salir mucho a la calle o irte de fiesta con tus amigos Bajarle algo: se dice cuando una persona está exagerando y poniéndole de más a algo que está diciendo. La lengua sirve para expresar pensamientos y estructuras culturales de los hablantes. También se utilizan otras locuciones de empleo exclusivamente de la jerga juvenil como sacar lo pie, soltar en banda, dar banda, subir los vidrios, bajar la antena.
El español que se habla en la República Dominicana es único en la forma de hablar, el vocabulario, y expresiones coloquiales que son usados para expresarse, como en algunas ocasiones el dominicano no pronuncia algunas palabras hay veces que al pronunciar una palabra hay letras que desaparecen cuando es pronunciada.
El español dominicano está conocido por la fluidez, la rapidez y muchas características más. Hay características diferentes de muchos de los otros países latinos y además hay características diferentes para cada parte de la isla. Veremos cómo la gente del norte (Cibao), habla diferente que la gente de Santo Domingo (La Capital) y también como esa gente habla diferente que la gente del sur.
Hay palabras que el dominicano cambia por completo en la manera en que es pronunciada comúnmente como la palabra “cómo tu estas” el dominicano la pronuncia ¿cómo tú` ta`?, hay palabras que el dominicano usa más frecuentemente como:
Un chin: se dice de algo para expresar “un poco”. Puede ser temporal un chin de tiempo o material, échale un chin de agua.
Conuco: parcela de terreno dedicada a la agricultura.
Sancochar: hervir o guisar un alimento.
Ya tú sabe: frase recurrente para confirmar algo.
Los dominicanos son únicos por la forma en que hablan y se expresan.
El español dominicano es la variedad de idioma castellano hablado en la República Dominicana. En el español dominicano se puede observar el uso de algunos arcaísmos. Los cuales a pesar de no ser muy corriente son conocidos por la gran mayoría de habitantes dominicanos, y el uso no es extraño (ejemplo de arcaísmos que son bregar, carátulas). Los lingüistas están de acuerdo que el español dominicano tiene sus raíces de los dialectos, del Andalucía y canaria con influencias de lenguas africanas. Como dice el texto la lengua ella permite que desarrollemos de manera peculiar la forma de decir las cosas de concebir la realidad como algunas expresiones que usamos los dominicanos, esa vaina! Es aplicable a esa “esa cosa” sin importar el tipo. La doña: se le dice a una mujer o señora. Ya tú sabe: frase ocurrente para confirmar algo. Tranquilo:Suele ir acompañado de “como tú esta”. Anda pal carajo! Es una expresión parecido a “wow” me dañaste el carro. Para finalizar nosotros los dominicanos somos muy creativos, tenemos nuestra forma de decir las cosa ya sea un hecho o un suceso tenemos esa particularidad que nos identifica como dominicanos.
El español en la República Dominicana es una variedad del castellano, se distingue por
una fonética muy parecida a la de la fonética del dialecto andaluz. Este tiene ciertas
distinciones según los grupos socioculturales del país.
Este tiene sus raíces principales en los dialectos de las regiones españolas
de Andalucía y Canarias. Aunque posee influencia africana e indígena en su vocabulario
la presencia africana en el léxico es menor a la indígena y esta a su vez es insignificante
en la pronunciación y en las estructuras morfosintácticas.
Este texto es muy cierto, los dominicanos tienen una forma peculiar de decir las cosas, a
veces tiende a hacer muy informales. Una manera muy usada para decir o expresar que
queremos que una situación mala siga o empeore entre dos o más personas es
argumentando de manera negativa, a esa acción se le llama echar leña al fuego, como
dice el texto.
Un comentaría a la frase tiene la sangre fría, se le llama a una persona que no tiene
sentimiento, que hace algo muy malo sin tener culpa y sin sentir arrepentimiento de eso
malo que hizo.
Otras frases que usan los dominicanos, aparte de estas dadas, están:
Abatido: significa que estás muy cansado, que no te puedes ni mover de lo cansado
que estás.
Achochado (achochao): es cuando no tienes ganas de hacer nada.
Agallú: es cuando alguien quiere conseguir algo a toda costa y al final no pudo.
Andariego: que te guste salir mucho a la calle o irte de fiesta con tus amigos.
Bajarle algo: se dice cuando una persona está exagerando y poniéndole de más a
algo que está diciendo.
Un chin: esta palabra significa “un poquito”. Por ejemplo: ¿Te gusta la pizza? – Sí,
pero solo un chin.
Darle luz a alguien: es informar a alguien, decirle lo que ha ocurrido mientras esta
persona estaba ausente.
En conclusión, los dominicanos somos muy creativos a la hora de expresar ideas,
cualquier idea puede ser expresada con palabras creadas en el momento, y la demás
persona fácilmente entender.
El español dominicano es la variedad del idioma castellano hablado en la República Dominicana, que al igual que el resto de variaciones del español en el Mar Caribe se distingue por una fonética muy semejante a la del dialecto andaluz. Este tiene ciertas distinciones según los grupos socioculturales del país.
Se caracteriza principalmente por el uso de algunos elementos antiguos y el apego a las formas tradicionales, lo cual se manifiesta en la conversación de palabras poco usadas en otros lugares, como bravo(enojado), dilatarse(demorarse), bregar(trabajar), musaraña(gesticulación burlesca), Prieto (negro, de color oscuro). Asimismo es una tendencia la reducción fonética en la cual es frecuente eliminar la (S) al final demás sílabas y las palabras, un ejemplo de esto es decir ete en Vez este y ma en Vez de más.
Este tiene sus raíces principales en los dialectos de las regiones españolas de Andalucía y Canarias. Aunque posee influencia africana e indígena en su vocabulario la presencia africana en el léxico es menor a la indígena y está a su vez es insignificante en la pronunciación y en las estructuras morfosintácticas podemos ver algunos ejemplos:
– Estar abatido: significa que estas muy cansado, que no te puedes ni mover de lo cansado que estás.
– Estar achochado: es cuando no tienes ganas de hacer nada. Es lo mismo que tener pereza.
– Agallu: es cuando alguien quiere conseguir algo a toda costa y al final no pudo.
– Andariego: que te guste salir mucho a la calle o irte de fiesta con tus amigos.
– Acelerado: es cuando una persona quiere terminar o hacer todo rápido.
– El can: la fiesta, el compartir con tus amigos, pero también puede ser algo negativo. Significa que eres una persona muy andariega y que siempre quieres estar en el medio.
– Cogerlo suave: Esto normalmente te lo dice una persona a ti cuando quiere decirte que llevas una vida muy rápida y deberías tranquilizante un poco.
– Cónchale: es como decir ¡joder! En España. Es una palabra que se usa para expresar enpjamiemto.
– Desguabinar algo: es cuando rompes algo.
– Darle luz a alguien: es informar a alguien, decirle lo que ha ocurrido mientras está persona estaba ausente.
Lo primero que se debe resaltar es el origen del español dominicano para luego conocer sus tan distintivas características. El español dominicano es la variedad del idioma castellano hablado en la República Dominica, que al igual que el resto de variaciones del español en el Mar Caribe se distingue por una fonética muy semejante a la del dialecto andaluz. Este tiene ciertas distinciones según los grupos socioculturales del país. El español de la Republica Dominicana tiene influencias de varias culturas y países, pero del mismo modo tiene una peculiaridad que hace que se distinga de cada uno de ellos. Este tiene sus raíces principales en los dialectos de las regiones españolas de Andalucía y Canarias. Aunque posee influencia africana e indígena en su vocabulario la presencia africana en el léxico es menor a la indígena y esta a su vez es insignificante en la pronunciación y en las estructuras morfosintácticas.
Los dominicanos se caracterizan por sus colores, costumbres, gastronomía y su tan peculiar forma de hablar. En mi opinión un dominicano se reconoce en la mayoría de lugares a donde va, pues sus jergas y frases ya son conocidas a nivel internacional. También el dialecto de los dominicanos varía mucho según la región a la cual pertenezca pues cada una tiene su distintivo y sus características, por ejemplo:
-En el Cibao, la gente utiliza la ‘i’ en vez de la ‘r’ o ‘l’. Ejemplo de esto es que ellos dicen “caiza” por decir calza, “voiviendo” por decir volviendo, “caminai” por decir caminar, entre otras.
-En la región sur es notable el rotacismo y la pronunciación explosiva de la ‘r’ al final de una sílaba: “caminarrr” por decir caminar; vámono parr pueblo” por decir vámonos para el pueblo. Con menos frecuencia se puede escuchar un cambio de la «o» por la «u» (vámonos = «vámunu»).
-En la región Este y Santo Domingo (Ciudad capital) predomina la «l»: “caminal” por decir caminar, algunos hablantes tienden a suprimir la R al final de sílabas por completo (Caminar= «caminá») y se acortan mucho más las palabras y se puede suprimir la «s» o aspirarlas (vamos a ver = «vamuavé»). También es común fusionar palabras, dando lugar al fenómeno conocido como sinalefa: “losojo” por decir los ojos.
A pesar de las diferencias regionales de los dialectos (geolectos), el español dominicano también tiene sociolectos, es decir que existe una diferencia de dialecto entre clases sociales. El español dominicano trae consigo un sinnúmero de jergas y expresiones que ya son representativas del país por ejemplo:
-Buquí: se refiere a una persona que come mucho.
-Chichi: bebé recién nacido o muy pequeño.
-Pariguayo: tonto.
-Ya tú sabe: frase recurrente para confirmar algo.
-Deguabinar algo: es cuando rompes algo.
-Fuñir: molestar.
-Sentirse jevi: es sentirse bien.
-La pinta: la ropa, el vestuario de una persona.
-A caballo regalao no se le mira el diente: haciendo referencia a que a los regalos no se les debe hacer crítica.
– Ta´ activa: persona que tiene mucho ánimo o anda de fiesta.
– Y cual e´ la dema: ¿Cuál es la envidia?
– Dame banda: déjame en paz/ no me molestes.
-Mira que bélico: mira que feo.
– La macate: cometiste un error.
En conclusión el español dominicano es mayormente coloquial, obviamente existe un lenguaje culto el cual se utiliza más en áreas laborales, pero entre amigos, colegas, familiares y hasta a veces con personas desconocidas contemporáneas a ti se utilizan jergas y se habla de una forma coloquial. También nuestro español incluye muchos refranes que hemos heredado de nuestros antepasados, y para todo tenemos una frase que lo represente, ya esto es parte esencial de nuestra cultura.
Para empezar, el español dominicano es la variedad del idioma castellano hablado en la República Dominicana, este se caracteriza principalmente por la creación y conservación de palabras pocos usadas en otros lugares. El español dominicano no es una lengua pura sino mezclada, tiene sus raíces principales en los dialectos de las regiones españolas de Andalucía y Canarias. Aunque posee influencia africana e indígena en su vocabulario. El habla del dominicano deriva del español, pero con el tiempo sus habitantes han ido cambiado el idioma derivado de este, renovando y usando como base el español castellano. República Dominicana está llena de dialectos regionales, donde cada región tiene sus propias costumbres, acentos y expresiones. República Dominicana esta dividida en regiones y estas cuentan con diversos dialectos, tanto así que se han convertido en un identificador para nosotros, ya que muchas veces no es necesario preguntar de que región es la persona con la cual hablamos, su manera de hablar termina delatando su origen.
El idioma Dominicano está lleno de modismos, hemos creado diversas palabras derivadas de otras que solo nosotros entendemos. Sabemos adaptarnos a diferentes formas de hablar dependiendo del espacio, tiempo y de qué tanto nos exige el momento a la hora de hablar. Aunque muchos ciudadanos sepan hablar de forma culta muchas veces prefieren hablar de forma coloquial ya que suele ser una manera más fresca y natural a la hora de hablar. Esta habla está llena de palabras compuestas, donde dos palabras existentes y muchas veces no relacionadas se unen para formar una nueva que n solo nosotros entendemos. El español de la República Dominicana es un dialecto que se divide dentro del mismo en otros sub-dialectos dependiendo de la región y la clase social.
La República Dominicana está compuesto por tres regiones principales, norte, sur, y este: El Cibao, El Sur, y El Este. Al contrario del resto del país, El Este es más dócil y callado. Las personas ahí hablan el español bien directo, sin acentos regionales, y pronunciación fuerte. En el Cibao son bien conocidos por su carácter amigable, actitud pacifica, y gramática campesina. Con más frecuencia, hablan rápidamente y con una voz baja, casi forzándote a inclinarte a escuchar la conversación. Los Cibaeños también son reconocidos por cambiar las palabras terminando en “er” con el sonido “ei”. Por ejemplo, en vez de decir “comer”, ellos dirían “comei”. Y en vez de decir “beber”, ellos dirían “bebei». También la letra “I» se cambia por una “R» en medio de palabras. Por ejemplo, la palabra “Aceite”, es pronunciada “Acerte”. Por último cambian la letra “L» por una “I». En la región Sureña, escucharas la letra “L” reemplazado por la letra “R” en español hablado. La palabra “espalda” es pronunciada como “esparda”. En la capital hablan un Español con una gran cantidad de términos; palabras como “capiar”, “joseo”, y “fronteo”— todas derivadas de los términos Americanos “To cop” (comprar), “Hustle” (moverse), y ¨Front¨ (una pantalla). Palabras que terminan en “ar”, “er” y ¨or¨ son pronunciados con la “R” cambiándose a un sonido “L”. En la capital en vez de decir “chofer”, ellos dirían “chofel”, y en vez de decir “manejar”, escucharás “manejal”. El español hablado por los capitaleños puede ser más entendible que sus contrapartes Cibaeños, pero están repletos de influencia Americana y talvez sea más difícil descifrar si no estás familiarizado con las expresiones.
La lengua sirve para expresar pensamientos y estructuras culturales de los hablantes. Los modismos están presentes en nuestra habla casi todo el tiempo y ha surgido una fuerte costumbre a ellos, tanto así que parece imposible dejar de usarlos. Es difícil llegar a conocer por completo la variedad de nuestro idioma debido a sus amplios significados y de como los hemos empleado a nuestra propia manera. Yo soy Cibaeña y aparte de la característica que identifica a muchos de nosotros que es el uso tan frecuente de la “I” en nuestra habla, nosotros al igual que las otras regiones podemos compartir las mismas palabras pero no los mismos significados, y es que los Dominicanos hemos adoptado un sin números de palabra iguales donde su significado depende de donde se diga, en qué momento y para referirse a qué. Todo el tiempo nos venos obligados a la necesidad de adaptarnos a nuevas cosas y a nuevos lugares conociendo así las mismas palabras pero que ya no significan lo mismo.
Para concluir, el español de la República Dominicana es muy variado y está lleno de subdialectos dependiendo de la región.
Con el intercambio cultural iniciado a finales del siglo 16 con el viaje de Colón a América, empezó la expansión del español al continente occidental, dando paso a la creación de nuevos dialectos y acentos que han evolucionado hasta convertirse en los que hoy en día conocemos. El español dominicano se considera el primer dialecto de español en América, pues fue dónde comenzó la colonización del continente y también es donde se basan los primeros escritos que hablan sobre el español americano.
La mayoría de españoles que ocuparon la isla en estos primeros siglos de ocupación eran de Andalucía y de las Islas Canarias, y su influencia puede verse aún hoy en día en el dialect, junto a la influencia taína en menor medida y, aún menor, la influencia africana.
Se suele clasificar según la región, reconociendose un dialecto cibaeño, uno suroeste y uno este. A veces también se menciona los dialectos de la frontera, que al tener tantas comunidades haitianas, suele incorporar palabras o expresiones del creole haitiano en su español.
En el artículo anterior se presentan algunas expresiones características del dialecto dominicano. Es interesante notar que existe una división social entre el habla culta y el habla popular, tomando como ejemplo la expresión culta «echar chispas», que es un poco más universal y entendible en otros países, y su equivalente «estar quilla(d)o, que es más particular a la República Dominicana.
Así mismo, las clases sociales altas suelen evitar algunas de las características del habla popular Dominicana, como la desaparición de consonantes al final de sílabas o palabras (luz = lú, verdad =verdá), la contracción de palabras (todo = to, nada = na) y la sinalefa (los ojos = losojo), entre otras cosas. Aún así, sí mantienen algunas características, como la africación de la y, el lambdacismo y la aspiración de la -s al final de las sílabad (¿cómo estás? = ¿cómo ejtáj?)
Todas las características anteriores y muchas más se encuentran en el habla popular.
Otra división que podemos encontrar y que se menciona en el artículo es la generacional. Ponen de ejemplo la frase juvenil «soltar en banda» contra la más antigua «dar la espalda». Una evolución interesante en el hablar de los jóvenes dominicanos que se ha dado a destacar recientemente es la influencia del inglés en el habla, tomando frases como «qué (es) lo qué (es)» y transformándola en «qué lo what». En esa misma onda se puede mencionar la incorporación de términos anglosajones como «party», «crazy» y expresiones como «oh my God». Lo cierto es que esta influencia del Inglés en el español dominicano ha existido desde hace mucho tiempo, tanto que varias palabras del español de hecho son españolizaciones de términos ingleses (como chequear, de «check», en lugar de revisar, o parquear, de «park», en lugar de estacionar). Pero expresiones puramente inglesas se veían usualmente restringidas a la clase social alta. Sin embargo, en la actualidad, esta influencia está llegando rápidamente a las clases media y baja.
Algunas frases y expresiones dominicanas que no se mencionaron en el artículo son:
•Fuñir (molestar)
•Tumba eso (déjalo, olvídalo)
•Hacer Bulto (Hacer un escándalo, usualmente para presumir)
•Cortar los ojos (mirar mal a alguien)
•Cuando Cuca bailaba o De cuando Cuca y Roque Tanque (Hace mucho tiempo, desde hace mucho tiempo)
•Dar bola (dar un aventón)
•Coger Brega o Coger lucha (tener dificultad para hacer algo)
•No dar un golpe (no hacer nada), a veces dicho como «no dar ni un golpe de Karate»
•Encaramarse (Treparse, subir encima de algo)
En fin, existen muchas más, pero es claro que la variedad de las expresiones dominicanas es una de sus características principales. Tiene muchas formas de decir algo, y algunas expresiones son realmente específicas y no existen otra manera de expresarlas (como la onomatopeya «chuipi» o «chuipe»). Esto, junto a su particularidad fonética y hasta gramatica, separa al español dominicano no solo del resto de dialectos americanos, sino también de los otros dialectos caribeños.
La forma tan peculiar en la que se emplea el lenguaje de los dominicanos ha sido objeto de estudio por muchos antropólogos, ya que esta se caracteriza por darle un sentido especial a cada hecho o cosa a la que se quieran referir. Es preciso citar al antropólogo cubano Jorge Ulloa el cual se ha centrado en estudiar estas palabras dice que el lenguaje empleado por los dominicanos es lo que los diferencia de los otros países que hablan el español o castellano, dado a que los dominicanos por lo general emplean conceptos para darle un toque más creativo y al parecer a que se haga más entendible para su cultura, para así poder comunicarse mejor dentro de la misma, como es el caso de la cita que se encuentra en el artículo la cual dice “se siembra quisquilla” que quiere decir que la persona está hablando mal de otro o “que la persona tiene sangre de maco” es decir que no le tiembla la mano para hacer algo o que no tiene miedo.
Por otro lado, el dominicano tiene una gran diversidad de conceptos empleados para significado a muchísimas cosas que en otros países son poco empleado o mejor dicho son conocidos porque algún dominicano lo ha utilizado en esos países o los extranjeros han venido a República dominicana y lo han llevado a su país. Por ejemplo:
Esa vaina: Es aplicable a “esa cosa”, sin importar el tipo.
La doña: Se dice de una mujer o señora.
Guagua: minibús que hace trayectos concretos a pueblos o distritos.
Lechosa: papaya.
Entre otras palabras que hacen del lenguaje dominicano uno de los más interesantes y jocoso de américa y el caribe.
Yarlenis Altagracia Ventura
El español dominicano (es-DO2)3 es la variedad del idioma castellano hablado en la República Dominicana, que al igual que el resto de variaciones del español en el Mar Caribe se distingue por una fonética muy semejante a la del dialecto andaluz.4 Este tiene ciertas distinciones según los grupos socioculturales del país.5
Se caracteriza principalmente por el uso de algunos elementos antiguos y el apego a las formas tradicionales, lo cual se manifiesta en la conservación de palabras poco usadas en otros lugares, como bravo (‘enojado’), dilatarse (‘demorarse’), bregar (‘trabajar’), musaraña (‘gesticulación burlesca’), prieto (‘negro, de color oscuro’).36 Asimismo es una tendencia la reducción fonética3 en la cual es frecuente eliminar la /s/ al final de las sílabas y las palabras, un ejemplo de esto es decir ete en vez este y má en vez de más.73
Este tiene sus raíces principales en los dialectos de las regiones españolas de Andalucía y Canarias.8 Aunque posee influencia africana e indígena en su vocabulario9 la presencia africana en el léxico es menor a la indígena10 y esta a su vez es insignificante en la pronunciación y en las estructuras morfosintácticas.11
El español dominicano (es-DO2)3 es la variedad del idioma castellano hablado en la República Dominicana, que al igual que el resto de variaciones del español en el Mar Caribe se distingue por una fonética muy semejante a la del dialecto andaluz.4 Este tiene ciertas distinciones según los grupos socioculturales del país.5
Se caracteriza principalmente por el uso de algunos elementos antiguos y el apego a las formas tradicionales, lo cual se manifiesta en la conservación de palabras poco usadas en otros lugares, como bravo (‘enojado’), dilatarse (‘demorarse’), bregar (‘trabajar’), musaraña (‘gesticulación burlesca’), prieto (‘negro, de color oscuro’).36 Asimismo es una tendencia la reducción fonética en la cual es frecuente eliminar la /s/ al final de las sílabas y las palabras, un ejemplo de esto es decir ete en vez este y má en vez de más.73
Este tiene sus raíces principales en los dialectos de las regiones españolas de Andalucía y Canarias. Aunque posee influencia africana e indígena en su vocabulario la presencia africana en el léxico es menor a la indígena y esta a su vez es insignificante en la pronunciación y en las estructuras morfosintácticas.
los dominicanos cuando llegan a cualquiel lugar lo primero en decir es ‘klk'(en forma de saludo,osea hola )’toy achochao'(para decir que esta sin animo,cansao,quieto)’el dame banda’ (no molestes,dejame tranquilo/a) ‘to lo que hace es motrenco'(no sabe hacer nada,todo lo hace mal) ‘muevalo de hay'(que se balla,que se quite)’as cocote y vendelo a peso'(dale mente a algo) ‘ta pasao'(cuando dices algo fuera de lo normal)’yo llego en bola de humo'(rapido)’el palomo'(el que no tiene tigueraje,ni molesta mucho)’bacano'(el que anda en flow,y es relajao)’mi pana’ (amigo) ‘cojelo suavitel’ (lento,sin rapidez) ‘tamo jodio'(algo malo que isiste y no se puede revertir) ‘y esa vaina’ (se le dice a un objeto cuando no se sabe que es, a una persona cuando es fea y se pasa de fea ‘y esa vaina ‘) ‘mi planta'(para decir que algo esta bueno. a una mujer para decir que esta mamacita o a un veiculo para decir que esta muy lindo y bien montao.
En conclucion los dominicanos somos unicos en nuestra forma de hablar donde llega un dominicano llega se save que es dominicano desde que habla.
El español dominicano es la variedad del idioma castellano hablado en la República Dominicana siendo dentro de sí, una variedad del español caribeño. El español de la República Dominicana es un dialecto que se divide dentro del mismo en otros sub-dialectos dependiendo de la región y la clase social. está conocido por la fluidez, la rapidez y muchas características . Hay características diferentes de muchos de los otros países latinos y además hay características diferentes para cada parte del país como las personas del norte (Cibao), habla diferente que la de Santo Domingo (La Capital) o como lo del sur .
El dominicano cuando llega a tierras extranjera se conoce por su habla , que dice “klk mi loco” las personas que están ahí presente de una vez dicen ese es dominicano, como dice en el informe publicado una de las palabras más usadas por nosotros los dominicano es la palabra “estoy quillao” cuando algo no anda bien y nos molesta lo que haya pasado, pero eso no es todo es un sin número de expresiones dichas por nosotros los dominicano que hacen referencia a muchas cosas como estas:
“Haciendo cocote”: Darle mente a algo, pensar mucho en alguna cosa.
“Me cayó como un bló”: No me gusta esa noticia, es una mala noticia.
“En bola de humo”: Rápido.
“Te doy hasta con el cubo del agua”: te voy a dar duro, atacar, presionar.
“No me cabe ni un mandao”: cuando acabamos de comer y comimos mucho
“Ta pasao”: eso no se hace, no eres normal, tú hiciste algo exagerado, fuera de lo común.
“No le dé mente”: no pienses en eso, no te preocupes por algo que no tiene solución inmediata. “Cógelo con suavena”: cógelo suave, lento, sin rapidez.
En fin no todo dominicano habla de esa forma todo depende de la clase social de la que venga, pero el español de la República Dominicana es bastante único y es distinguible entre los otros dialectos hablados en Hispanoamérica parece evidente que, en lo fundamental, el español dominicano es igual al de todas partes. Utiliza, básicamente, las mismas estructuras sintácticas, el mismo sistema de sonidos y comparte con los demás la mayor parte de su vocabulario.