Rita Díaz Blanco
Actualmente es miembro correspondiente de la Academia Dominicana de la Lengua, del grupo literario El Interiorismo y directora del Instituto Lingüístico Dominicano. Le apasiona la investigación lingüística, la literatura y la escritura. Es fundadora del Grupo Educativo Factum y encargada editorial del grupo Bienetre Media.
Cómo lo decimos los dominicanos
La lengua es una especie de bola mágica que recrea cómo piensa, vive y se relaciona el sujeto con los demás. Ella permite que desarrollemos de manera peculiar la forma de decir las cosas, de concebir la realidad y de transferirle a los hechos y sucesos esa particularidad que nos identifica como personas. Cuando escuchamos o leemos a alguien, nos formamos una idea de su forma de ser, de ver la vida; especulamos sobre la región geográfica y lingüística a la que pertenece y preconcebimos a sus paisanos por el uso que hace de su lengua. El dominicano tiene una especial forma de decir las cosas que lo distingue de otros países que comparten el español.
Cuando se quiere decir que se hace algo para acrecentar un mal ya iniciado se le echa leña al fuego/ más leña a la candela/ se siembra quiquilla o echa veneno: «Lo que ellos han manifestado fue el sentir de la Iglesia, pero no hay que echarle veneno, no hay que echarle leña al fuego (L.D., 21/04/2019).» Cuando alguien es calmado y no se altera por nada no tiene sangre en las venas/conserva la sangre fría/ tiene sangre de maco/tener sangre de chincha/tiene sangre fríaˈ o tiene la mecha larga. También hay otras expresiones que se refieren a esa actitud de no alterarse, como el decir a ese no lo mata nadie: «Pero Don Carlos, con sangre de maco, enfrentó los más variopintos enredos de reglas y de organización, logrando salir airoso de cada encomienda (L.D., 11/07/2018).» Si es el caso de alguien que habla mucho, se dice que habla hasta por los codos. Es común y popular utilizar esta locución para referirse a alguien que habla sin parar. A la par funciona la variación lexical hablar hasta por los poros y las locuciones hablar como un perico, haberse comido un loro y tragarse un radio: «En las esferas oficiales hay vivos que subestiman la inteligencia de los demás y hablar mentiras hasta por los codos (H.D. 10/12/2003).»
En ese mismo orden, cuando se estamos furiosos, nos ponemos que echamos chispas. Esta expresión se mantiene en las esferas cultas y de manera popular se toman más a menudo ˈestar quillaoˈ, ˈechar candelaˈ, ˈencendérsele/prendérsele la sangreˈ, ˈhervir la sangre (jerverle la sangre)ˈ, ˈprendérsele la pajarillaˈ, ˈsubírsele la sangre a la cabezaˈ, ˈtener la sangre calienteˈ, ˈtener la guinea más arriba del moñoˈ, ˈtener las espuelas puestasˈ, ˈtener las orejas calientesˈ y ˈno botar sangreˈ: «Le externo mis más sinceros respetos (…) pero así no, en buen dominicano estoy quillao (L.D.,26/01/2012).» Pero, si en realidad lo que queremos es despreciar o desatender a alguien le estamos dando la espalda, expresión común a nivel popular y nacional, utilizándose indistintamente entre clases sociales alta, media y baja. También se utilizan otras locuciones de empleo exclusivamente de la jerga juvenil como sacar lo pie, soltar en banda, dar banda, subir los vidrios, bajar la antena: «Guaidó llamó a la Fuerza Armada a dar la espalda al gobernante Nicolás Maduro, lo que los militares no secundaron, salvo un pequeño grupo (L.D., 01/05/2019).
Se trata de no sacarle los pies al pueblo. (L.D.,16/04/2009).»
La lengua española posee una extraordinaria riqueza dialectal en cuanto a fraseología se refiere. Las unidades fraseológicas recogen esa peculiar forma de decir las cosas, se emplean con el mismo significado idiomático, pero con un toque creativo y que aporta interesantes a dichas combinaciones y admiten diversas alternativas dentro de la misma cultura.
El español dominicano es desafiante, y es que nuestra cultura está dominada por acertijos o códigos indescifrables de expresión. Este posee características específicas como el yeísmo y el seseo. Los lingüistas están de acuerdo que el español dominicano tiene sus raíces de los dialectos de Andalucía y Canarias, con influencias de las lenguas africanas. También existen palabras usadas de origen arawak-taíno. Si se toma en cuenta la forma de hablar de nuestro país, debemos admitir que se hace necesario dividirlo en varias regiones que tienen características particulares. En la región Norte predomina el uso de la “i” entre las palabras, en la región Sur predomina la “r”, mientras que en Santo Domingo predomina la “l”. El dominicano cuando está enojado, “se le prende la sangre”, o simplemente te «da la espalda» si no te entiende. No espere un no de un dominicano; no sabe pronunciarlo ni le interesa. Nosotros utilizamos los eufemismos diplomáticos como: “Vamos a ver”, “Yo te llamo”, “Déjame pensarlo”. El uso de los diminutivos también es muy frecuente escucharlos, como, “dame un dulcito” o “amorcito”. He aquí otras voces, fraseos, dichos, usos fonéticamente relajados que encontramos en el español dominicano: “la macó”, para referirse a que alguien se equivocó. Si alguien estudió mucho, probablemente te diga que “se comió lo libro”. Un “chin” significa “un poquito”, o la “ñapa” para pedir un poco más. Finalmente, el empleo de palabras y expresiones dialectales en el marco de una geografía lingüística como la dominicana, debe entenderse no como una decadencia, sino, más bien como un nuevo tipo de instrucción lingüística y comunicativa.
El español dominicano es parte del llamado español caribeño, y tiene como características específicas el seseo (no hay diferencia de pronunciación entre la s, z, y c, antes de e e i), el yeísmo (la ll pronunciada como y) y la ausencia del voseo. En el Cibao, se suele hablar intercalando una «i» en la mayoría de palabras, y en el sur cambiar la «L» por la «R». Además de esto, los Dominicanos somos conocidos por hablar rápido y alto. otra características del español que se habla aquí en la República Dominicana, es la omisión de la letra ¨»D» en el lenguaje hablado. Cuando la letra ¨»D» aparece entre dos vocales, generalmente no se pronuncia. También común de la pronunciación del español dominicano, es tragando la letra ¨»S» Generalmente, la letra «¨S» no es pronunciada. Esto es notable al final de las palabras, pero también se aplica a la letra o sonido ¨»S», al comienzo o por la mitad de algunas palabras.
Al ser dominicana y leer este artículo me sentí muy identificada, las expresiones mencionadas son bastante común entre los dominicanos, pero hay más las cuales no deben pasar desapercibido, como el saludo mas común: «Klk» o «Dame lu». También está una expresión que actualmente es bastante usada: «El final», se refiere a cuando algo es bastante bueno, ejemplo, «usé un producto que es el final quitando el acné». Otra que no se puede quedar es: «Jablador», esta hace referencia una persona que no dice la verdad, que miente. También está: ¨»Jevi» o «bacano», se refiere a algo cool, chevere y divertido.
Estas entre otras expresiones hace que el español dominicano sea tan único
El español dominicano es un dialecto que se divide dentro del mismo en otros subdialectos dependiendo de la región y clase social. En la región “Sur” suelen hablar intercalando la “r”, en el “Cibao” acostumbran a intercalar la “i”, en la región “Este” suelen intercalar la “l”. Esto nos ayuda a entender un poco de cómo funciona el español dominicano, este también posee un dialecto un tanto único cuando nos referimos a fraseología, como cuando decimos: “tiene la sangre fría” o “a ese no lo mata nadie”, para referirnos a que tiene una actitud calmada y no se altera tan fácilmente. Cuando tu profesora te dice que “hablas esta por los poros”, refiriendo sé a qué hablas mucho. Otras frases serian “¡Y é fácil!” para referirnos a cuando nos quieren engañar y los descubrimos también usan “po tu cree que yo soy indio” o “vendiéndole chofan a un chino”.
Cada país hispanohablante, a pesar de que el idioma es el mismo, siempre tienen algo que los representa e identifica, y República Dominicana no es la excepción. Nuestro país es rico en historia y cultura lo que hace que nuestro español sea único y especial. Algo que nos caracteriza es que dependiendo de la región o zona geográfica del país (sur, norte y este), el acento cambia ligeramente, es decir, En la región del cibao tienden a usar la “i” donde va una “r”, en la región sur la “r” se destaca entre las demás letras, en la región este se pone “l” hasta donde no lleva. Veamos unos ejemplo:
• Cibao: Voy a buscai agua ai pozo.
• Sur: Vamunu a correrrr par malecón.
• Este: No hay cualto no vamos andal.
Como pudimos ver la lengua nos permite comunicar diferentes informaciones de una persona a otra, las distintas jergas, dialectos y argot son parte del mismo. Nosotros, los dominicanos, utilizamos ciertas expresiones para dar a entender una situación del momento, como la frase: a ese no lo mata nadie, desea dar el significado de aquella actitud de no alterarse de esa persona, o la popular locución para señalar a quién habla mucho: hablar como un perico, te comiste un loro, tragaste un radio, y hablar hasta por los codos. Otras expresiones son:
• En olla, o, estar en olla = desbaratado, sin dinero.
• A pie, estar a pie = no tener vehículo o medio rápido de desplazarse.
• Vaya pa’ llá = quítese de mi vista, aléjese.
• Tener minutos: tener saldo en el móvil.
De algo si estamos seguros, y es que todos los extranjeros coinciden que el dominicano canta cuando habla, buscamos hablar más en menos tiempo, lo que no permite muchas veces a personas fuera del entorno comprender. Podemos destacar el uso de la palabra “vaina”. Mucha gente cree que esta palabra es vulgar pero no lo es, significa “cosa” o sea cualquier cosa y uno la usa para cualquier sustantivo. Por ejemplo, si quieres que alguien te dé los zapatos, di, “oye pásame esa vaina”. También están las palabras “jevy” y “vacano” las dos son muy usadas y significan “chévere” o “cool en inglés” o cuando en vez de decir “¿cómo estás?” se dice, “¿cómo tu ta?”, “¿qué lo que?”, “dame luz”, “dime a ve”, entre otros. Es más común que los jóvenes tiendan a decirlas por la influencia de su entorno, la publicidad, la televisión, las redes sociales, la música o simplemente por moda.
Recapitulando, para comunicar algo no hay límites, los dominicanos son un vivo ejemplo de eso, su historia y cultura hacen posible esto. Factores como la manipulación de la fonética, duplicación o neutralización de ciertas letras, uso de la sintaxis, ultracorrecciones, semántica y morfología, son desencadenantes para su originalidad y variación.
El castellano llegó a Santo Domingo con los españoles que descubrieron la isla y así mismo sucedió en los demás países de América Latina, este nuevo idioma se impuso ante las lenguas aborígenes ya existentes haciendo que estas desaparecieran por completo. La lengua castellana se acomodaba las nuevas necesidades sin embargo algunas palabras nativas se conservaron para nombrar cosas desconocidas para los españoles, aceptándolas como enriquecimiento al castellano. Podemos decir entonces que el español dominicano empezó a destacarse en ese momento de aceptación por parte de los españoles de palabras locales, sobre todo objetos, plantas y frutos. La influencia del español y lenguas de otros países contribuyo también a lo que es el dialecto dominicano. Este español tiene particularidades en el orden fonético, en las construcciones morfosintácticas, en el vocabulario y los distintos significados de las palabras, con relación a los demás dialectos del español.
De acuerdo al informe, no cabe duda de que el español dominicano es muy variado y cuenta con muchas expresiones para cualquier tipo de situación, para alguien que no es de aquí pueden sonar extrañas, pero sin duda un dominicano las entiende a la perfección. Desde “echar leña al fuego”, “tener la mecha larga”, “hablar hasta por los codos”, o el famoso “estar quillao” son frases usadas en el español dominicano y con el paso del tiempo siguen surgiendo expresiones más modernas y juveniles, por ejemplo:
• Darle luz a alguien: es informar a alguien, decirle lo que ha ocurrido mientras esta persona estaba ausente.
• De lo mío/ mío personal: son expresiones para dejar dicho que una persona es su mejor amigo/a, o que esa persona y él se llevan muy bien.
• La vaina: vaina es una palabra que se usa mucho en la República Dominicana, esa palabra se dice para referirse a cualquier cosa o persona.
• Que lo que o klk: es una palabra con varios significados usada para preguntarle al otro que como está o que está haciendo.
• Un pique: es como un enojo.
• Estar en olla: no tener dinero.
• Manito/manita: Así le dices a un amigo o amiga.
• Sentirse jevi: es sentirse o estar bien.
• Estar en el medio: estar en la calle.
• Un chin: esta palabra significa un poco.
• Ya tú sabe: frase recurrente para confirmar algo.
Otras palabras que han sido muy destacadas últimamente son “Popi” y “Wawawa” para referirse, en la primera palabra a aquellos de clase social acomodada, mientras que los “wawawa” son los que vienen del barrio y aquellos que los sitúan en el medio de los dos les llaman “Popiwa”.
El español que se habla en la República Dominicana es único y los dominicanos son conocidos por hablar rápido y alto. La gente del norte (Cibao), habla diferente que la gente de Santo Domingo (La Capital) y también ellos hablan diferente que la gente del sur o del este, pero existen algunas características similares. La aspiración de la S, por ejemplo, en vez de decir “¿Cómo estás?” se dice, “¿Cómo tu ta?”, La omisión de la letra D, por ejemplo, en vez de decir “enamorado”, ese dice “enamorao”, Otra característica es la aspiración de la R, por ejemplo en vez de decir “tú vas a ver” se dice, “tu va vé” o cambiarla por una L, por ejemplo en vez de decir “abre la puerta” se dice, “abre la puelta”.
En conclusión, el español dominicano consta de muchas frases y expresiones que hacen que sea bastante jocoso tanto para el que lo escucha como para el que lo habla, puede ser un poco complicado pero es parte de nuestra cultura.
Para empezar, El español dominicano es parte del llamado español caribeño, y tiene como características específicas el seseo (no hay diferencia de pronunciación entre la s, z, y c, antes de e e i), el yeísmo (la ll pronunciada como y) y la ausencia del voseo. Además, el español, República Dominicana también tiene parte de la población que habla creole haitiano (de sus vecinos inmigrantes y sus descendientes), y una pequeña comunidad de habla inglesa en la península de Samaná, constituida principalmente por descendientes de esclavos estadounidenses que llegaron a la península en el siglo XIX. Así, el español de República Dominicana está atravesado tanto por arcaísmos como por neologismos, africanismos y extranjerismos, los que lo convierten en un idioma antiguo y moderno a la vez.
En este artículo nos define claramente como nos expresamos y pensamos los dominicanos, las fraseologías que utilizamos en nuestro diario vivir. En este nos damos cuenta cuales son las frases más comunes que empleamos en nuestro lenguaje ya que en cada región tiene su manera de hablar y de expresarse de modo lingüístico. El dominicano utiliza palabras como Un chin: para referirse “un poco”. Puede ser temporal (un chin de tiempo) o material. Conuco: para referirse, parcela de terreno dedicada a la agricultura. Bobo: chupete de los niños. Pamper: Para referirse a pañal. Chichigua: Para concernir a las cometas que vuelan los niños. Colmado: Para aludir que es un pequeño supermercado de barrio con todo lo que imagines. Suele llevar el nombre del propietario (por ejemplo: Colmado Adela). Gallera: para mencionar el recinto donde pelean los gallos. Suelen celebrarse en domingo en un espacio cerrado, circular y privado (se debe pagar por entrar). Esa vaina: para remitir que es aplicable a “esa cosa”, sin importar el tipo. En definitiva, un sin fin de expresiones que identifican a los dominicanos como uno de los lenguajes más interesantes y épicos en américa y el caribe.
-El español dominicano es la variedad del idioma castellano hablado en la República Dominicana, este tiene ciertas distinciones según los grupos socioculturales del país.
– Los Dominicanos son conocidos por hablar rápido y alto. El español que se habla en la República Dominicana es única en la forma de hablar, el vocabulario, y expresiones que son usadas.
-Lo que el artículo dice es que básicamente la lengua es la forma y con lo que nosotros como seres humanos (específicamente los dominicanos), tenemos de mostrar la manera en que pensamos y nos relacionarnos con otros, permitiendo que desarrollemos cierta forma de decir las cosas, y esas son las que nos diferencian de otros lugares a la forma de hablar que también comparten el mismo idioma.
-Se caracteriza principalmente por el uso de algunos elementos antiguos y el apego a las formas tradicionales, lo cual se manifiesta en la conservación de palabras poco usadas en otros lugares, como bravo (‘enojado’), dilatarse (‘demorarse’), bregar (‘trabajar’), musaraña (‘gesticulación burlesca’), prieto (‘negro, de color oscuro’).
-Entre otras :
(Anjá !) Es una expresión que significa:» Como!?, Wao!?, cáspita!, (Andá !) : Es una expresión muy usada por los dominicanos, similar a «que pena», «es lamentable». Denota lamento o decepción. Ej. «¿Sabias que murió el vecino ? – Andá.». Ver conchole!, (Anda pal carajo !): Es una expresión parecida a «Wow!» , «cáspita» «recorcholis . ej. «Anda pal carajo, me dañaste el carro»!, (Aficie) : (asfixie) : estar aficiao : estar locamente enamorado. «..esa jeva ta’ aficiá de ese tipo», «tiene un aficie que se va volver loca»
-Unas de las características del español que se habla en la República Dominicana, y otras islas Caribeñas es que la letra “D” desaparece, por ejemplo:
Por ejemplo, en vez de decir ¨enamorado¨, nosotros diríamos ¨enamora ‘o¨, y en vez de decir ¨cansado¨, nosotros diríamos ¨cansa ‘o¨. En general, cualquier palabra terminando en ¨…ado¨ sonara como ¨…a ‘o¨.
-En conclusión los dominicanos somos intrépidos y creativos en cuánto a palabras nuevas creadas en el momento se refiere; haciendo que dicha palabra deje a entender lo que queremos decir
El español dominicano es único de acuerdo a su forma de hablar, su vocabulario y expresiones coloquiales que usamos por costumbre. Los dominicanos tienen una fluidez y rapidez que los diferencia del resto de los españoles.
El español dominicano se caracteriza principalmente por la omisión de la letra «D», en vez de decir «enamorado», se dice «enamorao». Otra de las características es que en la mayoría de los casos se tragan la «S», ejemplo: en vez de decir «pescado», dicen «pecao» (aquí también desaparece la letra D), y el cambio en el orden de las palabras. Es común escuchar a un dominicano saludarte diciendo «¿Cómo tu’ ta?» en vez de decir «¿Cómo tú estás?.
Poco a poco se introducen frases y expresiones aveces pocos jocosas, pero que deforman el uso correcto del español. Algunas de estas frases son:
• Abrió gas: significa que salió huyendo o corriendo.
• Activao: con ánimo y listo para una fiesta.
• A esa le picho un juego: se usa para referirse a una mujer que se ve bien.
• A lo callao: en silencio o en secreto.
• Ayúdame ahí: para pedir un favor.
• Gustanini: joven que vuelve locas a las mujeres.
Estas son algunas de las frases más usadas por los dominicanos mayormente jóvenes, lo cual hace que sea cada vez más amplio y dimensionado debido al uso de las redes sociales y la alta comunicación que existe entre las personas.
En base a lo que dice el artículo, cada una de las frases mencionadas anteriormente son una forma peculiar de expresar sus ideas o comentarios a los demás, dándole un toque creativo a cada una de las palabras habladas por los dominicanos, los cuales son considerados por muchos como incorrectos. Sin embargo esta es una forma especial de decir las cosas, por lo que nos distingue de los tantos países de lengua española.
Sin discusión alguna juan Bosch fue la llave que nos abrió la puerta al lenguaje dominicano después de la muerta de Trujillo en 1961, usando frases como “Tutumpotes”, “Carros pescuezo largo”, “Oligarquía”, “Hijo de Machepa”, y muchos otros que deslindaban los grupos sociales.
Algunos lingüistas y dialectólogos entienden que la lengua se constituye en el habla o en los hablares socializados. El sujeto cultural se socializa mediante el lenguaje. Hablar significa vivir para los demás y para nosotros mismos. Las intenciones del hombre como ser social se muestran en el intercontacto creado por los diversos hablares, donde muchas veces el uso se convierte en norma, como ocurre hoy en nuestra República Dominicana. Habla culta y habla popular se sostienen de manera diversa en la comunicación social. El lenguaje es el campo de batalla del sujeto en la sociedad y éste se va manifestando tanto en la geografía urbana como en la rural.
Lo que nos identifica por región es la forma como nos expresamos:
La Región Oriental: Las personas ahí hablan el español bien directo, sin acentos regionales, y pronunciación fuerte.
Región Norteña: Los Cibaeños también son reconocidos por cambiar las palabras terminando en ¨er¨ con el sonido ¨ei¨.
La Región Sureña: En la región Sureña, escucharas la letra ¨L¨ reemplazado por la letra ¨R¨ en español hablado.
La Capital: El español hablado por los capitaleños puede ser más entendible que sus contrapartes Cibaeños, pero están repletos de influencia Americana.
La República Dominicana es una isla Caribeña con una cultura, historia, y población diversa con distinción. Los dominicanos son conocidos por hablar rápido y alto. El español que se habla en la República Dominicana es única en la forma de hablar, el vocabulario, y expresiones coloquiales que son usados.
Ta directo, se vació: indica que alguien tiene problemas intestinales.
Ta dao: persona que está cansada.
Fiebrú: cuando a alguien le gusta demasiado algo.
No ombe: expresión de desacuerdo.
Pana ful,: mejor amigo (a).
Nítido: algo que nos cae perfecto.
Caliente conmigo: expresión utilizada para indicar descontento.
Frío (a) con la compañía: indica la buena relación entre dos personas.
El español dominicano es una adaptación del español castellano a la cultura dominicana. A pesar de que las características generales del mismo son propias del español castellano, al momento de aplicarlo en el habla se pueden notar diversas variaciones que se le han ido añadiendo con el pasar de los años. Los dominicanos aplican a su lengua palabras derivadas de otras lenguas y adaptadas a la propia, por ejemplo, cuando decimos «bacano» hacemos referencia a algo que es muy bueno, y aunque pareciera que la palabra es creación de los hablantes, no es asi, esta palabra proviene del latín «bacán». Otra palabra que es extraída de otras lenguas es «chin», esta proviene del mandarín donde «chin» significa dinero.
Cabe resaltar que dependiendo del espacio geográfico que analicemos dentro del encontraremos diversos dialectos que se distinguen de las otras regiones dentro del mismo país, por ejemplo, en la parte metropolitana se utilizan muchos vocablos extraídos del inglés, incluso algunos se modifican, pero siempre manteniendo relación con su significado original, por ejemplo, la palabra «guachimán» viene del inglés «watchman», otra palabra de esta familia es jevi/jevito que viene del ingles heavy y hace referencia a cualquier cosa que se vea bien o este a la moda.
Tambien podemos encontrar algunas que son creación de la creatividad colectiva de la nación, por ejemplo, cuando decimos » vamos a un hacer coro» nos referimos a ir de fiesta o a hacer una reunion con amigos, si le decimos a alguien «palomo» nos referimos a que es una persona poco astuta y facil de engañar, «ponerla en china» es una frase popular que significa poner las cosas más difíciles de lo que son o complicar las cosas, otra frase típica es «te guayaste», es una manera de decir que te equivocaste o que fracasaste.
En conclusión, el español dominicano es una lengua muy rica en vocabulario, ya que posee dialectos de casi todas las lenguas adaptadas a la cultura nacional, además de que la creatividad del dominicano es bastante amplia y eso queda bien claro cuando observamos la comunicación de los dominicanos. Nunca se quedan cortos para usar frases curiosas para expresar sentimiento o situación, esta manera de hablar sin duda que le da una personalidad propia al español dominicano.